La gestión emocional sigue siendo la asignatura pendiente de muchos directivos y una pata esencial para una buena resolución de conflictos. Tan importante como una consultoría de empresa para centrar los objetivos de tu negocio.
Comencemos por las emociones. Hazte a la idea de que son agua, es decir, el 70 % de lo que eres. Las emociones todo lo riegan, así que el primer error que puedes cometer es pensar que no te van a condicionar y el segundo, querer someterlas a tu control. En el primer caso te entregas al azar y en el segundo juegas a ser Dios.
Hay un tercer gran error: pensar que son un impedimento, que no son útiles ni tienen una funcionalidad para el ser humano. Y aún hay un cuarto error fatal. Juzga tus emociones en vez de determinarte a conocerlas y estarás perdido.
Mi propuesta comienza con un cambio sensible, tal vez difícil hasta que se entrena. Te propongo que vivas en un estado de receptividad para que, cuando estas llamen a las puertas de tu organismo, puedas atenderlas sin que tengan que insistir, porque cada vez lo harán con un mayor nivel de intensidad y pueden tornarse realmente peligrosas.
Las emociones vienen a modificarnos porque en algo las vamos a necesitar. Piensa que esa corriente de agua trae algo sólido que escapa a tu consciencia. Yo te propongo que es mejor que cuestiones tu inteligencia, antes de cuestionar la validez de las emociones y también que actúes con curiosidad.
¿Por qué estoy excitado o apagado ahora? ¿Qué me quiere decir mi cuerpo? ¿Cómo puedo transitar esta tristeza o esta incertidumbre? Si llegas a este punto, ya has obtenido un estado significativamente beneficioso para tu salud, entendiendo esta como un estado de integridad personal por la cual lo que piensas y lo que sientes se parecen mucho a lo que haces.
A partir de aquí podrás seguir elevándote hasta donde quieras llegar en la danza eterna que te propondrán las ideas y las emociones.
Acéptalas entonces y procura conocerlas. Investiga. Resumidamente, la ira separa; la tristeza, une; el miedo nos marca el camino hacia lo sagrado de cada cual… Explora las demás porque hay una gama enorme y privilegiada de colores emocionales, que, a su vez, se combinan entre ellos. Lo que no existe es el blanco ni el negro; juega pues a investigar el sentido de estos extremos y lo perjudicial que puede resultar estancarse en estos conceptos, en esta polaridad.
Procédete ahora a conducirlas. Para entender que el control no es la solución para esto; piensa que viajas en coche. Solo controlas lo que está en sus manos, nunca el estado del firme, lo que hace el otro conductor o las condiciones climatológicas; con todo esto, hay que conducirse en tiempo presente no solo para evitar accidentes, sino también para disfrutar del viaje.
Como dijo Ortega y Gasset, «yo soy yo y mis circunstancias» (ojo con esto). Date tiempo a observarlas, porque no hay emociones buenas y malas, hay emociones y circunstancias.
A veces tenemos una iniciativa brillante, pero las circunstancias no son favorables. Puedes renunciar, esperar, crear las condiciones a fuego lento, ir hacia adelante calculando y asumiendo las circunstancias, etc.
A veces tienes que comunicar, por ejemplo, a un empleado un despido y te sientes irascible o avergonzado. Hazte cargo en primer lugar de tu estado, ojo aquí con el factor tiempo porque solemos andar con prisas para no sentir. Integra luego tu estado con lo que vas a hacer y verás como el resultado es más eficaz. Tal vez necesites que algún compañero te acompañe o una estrategia de comunicación simple o tal vez delegar o cambiar de escenario, de despacho, etc.
Lo que no puedes hacer, ya lo dijimos arriba, es creer que la emoción es algo ajeno a ti que viene a perturbarte; lo entendamos o no, la emoción es tuya y, por misterioso que pudiera parecerte, viene a ayudar.
No te recrees tampoco en la emoción. Se trata de aceptarla y descifrar qué trae. En cuanto puedas, déjala ir y da las gracias.
Finalmente, cuando todo haya pasado y hayas decidido a, b, c o d, quiero que sepas que no has errado. El error no existe. Simplemente habrás alcanzado el mayor grado de acierto que en ese momento hayas podido lograr. Has rendido al máximo de lo que en esas circunstancias pudiste dar. Lo demás es literatura mental, poco útil para estos menesteres y, en el mejor de los casos, prospección, cuando nos damos la oportunidad de reflexionar a posteriori y aprender.
Antes de despedirnos, démosle un tiempo a entender qué es un conflicto. Desde luego, no es un obstáculo, no es un problema y solo es negativo si mantienes un excesivo apego a la idea previa por la cual pensabas que el camino iba a ser llano; en este caso, notarás que conviertes el conflicto en una fuerza opositora.
Yo te propongo que pienses en el conflicto como en una oportunidad de crecimiento y aprendizaje. Cuando llegue, acógelo y celébralo, porque anuncia evolución, en la dirección deseada o en una alternativa. La involución no existe, créeme, es otro invento; acepta esto como cierto cuando veas a un árbol decrecer o a un río ir desde el mar hacia la montaña. Evita estancarte.
Lo que sí existe es el final de las cosas. Leí una vez, de un jugador de póker multimillonario, que el secreto de su éxito era que le daba absolutamente igual perder dos millones de dólares en una partida porque sabía que, tarde o temprano, ganaría diez.
No es magia lo que propongo, sino crearse un estado de confianza tal que la gestión de emociones ante un conflicto no solo sea entendida e integrada como parte del juego, sino como un estímulo que te facilite un resultado mejor de lo que decidas en su despacho o en el salón de tu casa.
Disponte y a partir de ahí, entrénate día a día en el arte de poner el conflicto en consonancia con las emociones. Este ejercicio te ayudará a tomar perspectiva y a ganar recursos en el afrontamiento de las circunstancias difíciles que trae el camino, hasta hacerte progresivamente en maestro de ti mismo, que, a la sazón, es la única variable que realmente puedes controlar.
Alfonso González de Valdés Correa
Psicólogo y psicoterapeuta
Presidente Asociación Ponte
www.asociacionponte.com
When you subscribe to the blog, we will send you an e-mail when there are new updates on the site so you wouldn't miss them.
Somos una consultoría estratégica de empresas especializada en el apoyo a Pymes y StartUps para su consolidación y desarrollo.
"Si contribuimos al progreso y sostenibilidad de nuestro tejido empresarial. Todos Avanzamos"
Suscríbete a nuestro blog y recibe nuestras novedades, noticias del sector y promociones.
Comentarios